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Madrid se puede explorar de distintos puntos de vista desde los más clásicos recorriendo la historia de la Edad Media pasando por el Madrid de Cervantes y llegando al Madrid más contemporáneo. Se mire por donde se mire Madrid tienen un encanto especial que logrará cautivar a los turistas más exigentes.
La expresión "El Madrid de los Austrias" tiene connotaciones geográficas e históricas refiriéndose al periodo de desarrollo urbanístico que experimentó la ciudad durante los reinados del Rey Carlos I y Carlos II con quien se extinguió la rama española de los Austrias.
La visita para conocer Madrid puede partir del centro neurálgico de la ciudad en la Plaza de Sol avanzando hacia la Plaza Mayor y pasando por los alrededores del Palacio Real y sus cuidados Jardines de Sabatini, que en primavera están florecidos, cruzaremos el viaducto para descubrir los orígenes de Madrid. Recorreremos los vestigios de la época medieval a través de la plaza de la Paja, que fue el foco central del comercio; la plaza de San Andrés, la costanilla de san Pedro y la calle del Cordón, donde vivieron ilustres personajes españoles; para concluir la visita junto a la plaza de la Villa que alberga la Casa y Torre de Lujanes y la Casa de la Villa hasta 2007 sede del Ayuntamiento de Madrid.
Madrid ocupa un papel protagonista de algunas de las obras más conocidas de la literatura española. Sus calles, plazas y rincones han servido de inspiración a muchos de los escritores que vivieron en sus barrios y pasearon por sus calles, muchos ellos pioneros de la Revolución literaria de la Ilustración. Muchas de sus obras vieron la luz en las mesas de los antiguos cafés literarios que, durante el siglo XIX, proliferaron en la capital.
Al igual que existe un Londres victoriano de Dickens o un París de Balzac, existe también un Madrid de Cervantes y es precisamente el quien nos guiará en este recorrido por el Barrio más importante del Siglo de Oro de la literatura castellana. Nos llevará por cada lugar que visitó y en donde vieron la luz algunas de sus obras más importantes.
Esta visita para conocer Madrid parte desde la Plaza Mayor desde donde nos dirigiremos hacia el paseo del Prado hasta llegar a la zona de crecimiento entre los reinados de los Austrias y los Borbones. Atravesando la Puerta del Sol y el primer tramo de la calle de Alcalá, llegaremos al Barrio de las Letras. En la época de los Borbones tuvo fama la Fonda de San Sebastián, lugar de reunión de los escritores y artistas. Estuvo frecuentada por Moratín, López de Ayala, Iriarte, Juan Bautista Muñoz, entre otros.
Siguiendo la huella del escritor universal Miguel de Cervantes avanzaremos hasta la calle Huertas, eje principal del barrio, en el número 18 se encuentra Casa Alberto, uno de los restaurantes con más historia de Madrid. En el segundo piso del local vivió nuestro guía Cervantes y allí escribió Viaje al Parnaso y la segunda parte de Don Quijote. La imprenta de Juan de la Cuesta, donde se imprimió la primera parte del Quijote estuvo en la calle Atocha y sobre la calle del Prado está el Ateneo de Madrid, centro de la cultura durante XIX y XX.
En el centro del barrio se encuentra el Convento de las Trinitarias Descalzas donde descansan los restos de Cervantes continuaremos hacia la casa Museo de Lope de Vega para finalizar el recorrido en la plaza de las Cortes, junto al paseo del Prado.
El recorrido comienza en la plaza de Cibeles, precedida por la estatua de la diosa Cibeles que enfila sus leones hacia la calle de Alcalá, en la Plaza podemos admirar el Palacio de Correos conocido desde el 2011 cómo el Palacio de Cibeles y actual sede del Ayuntamiento de Madrid, A espaldas de la diosa discurre la calle de Alcalá y nos deja entreveer otro de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, la Puerta de Alcalá obra encargada por Carlos III al arquitecto Sabatini; a su costado se encuentra la Puerta de España que nos da acceso al parque de El Buen Retiro, sin duda el jardín histórico más bello de Madrid.
Descubriremos los lugares más emblemáticos del parque: el estanque, el palacio de Velázquez y el palacio de Cristal, perfectamente conservado como se concibió originalmente en 1886. Saliendo del parque contemplaremos el renovado Casón del Buen Retiro y concluiremos la vista ante la restaurada iglesia de los Jerónimos, cercana a ese gran entorno museístico que es el Paseo del Arte.
El Relevo Solemne y cambio de la Guardia Real nos acerca al Madrid más monárquico, el evento tiene lugar en la Puerta del Príncipe del Palacio Real de Madrid los primeros miércoles de cada mes. Rememora el que se hacía diariamente en tiempos de los reyes Alfonso XII y Alfonso XIII. En él participan un total de 429 efectivos y 105 caballos.
Primer miércoles de cada mes a las 11:00 h, excepto julio, agosto y septiembre se excluyen también los miércoles en que se celebra algún acto oficial.
Aprovecharemos también para recorrer la Plaza de Oriente donde se encuentra situado el Palacio Real y además podremos visitar el Teatro Real, la casa de la ópera madrileña por excelencia.
La noche de Madrid siempre ha sido activa, a finales de los 70s los nuevos aires de libertad impulsan una corriente alternativa, donde los protagonistas son los jóvenes que se expresan a través de la música, el cine, la pintura, la fotografía, la moda.
La Movida transformo el barrio de Malasaña, lo lleno de tiendas alternativas, comercios, tabernas y cafés y lo ubicó para siempre como parte imprescindible de la visita a Madrid. Puedes callejear y pasear descubriendo la calle Ruiz, la plaza Dos de Mayo, la plazuela de Antonio Vega, hasta llegar a Madrid me mata, bar-museo en la calle Corredera de San Pablo.
La comunidad judía de Madrid es tan antigua como la propia ciudad y se remonta al siglo IX, si bien la primera referencia que se conoce de la existencia de los judíos en Madrid data del año 1053.
La visita para conocer Madrid desde esta perspectiva se inicia en la Vieja Judería que surge en 1085 y estaba situada en las inmediaciones del actual Teatro Real y de la calle del Arenal. Junto a la judería estaba el cementerio situado en lo que hoy es la Plaza de Oriente, a pocos metros sobre la calle Mayor encontramos el Palacio de Cañete, que se comenzó a construir a finales del siglo XVI. Este palacio de clara influencia herreriana es la sede de Sefarad-Israel,una institución de gran valor simbólico. Avanzamos hasta el Palacio Real.